Acoso callejero, por Karime Anguiano Díaz


(Gallardo, 2017)

ACOSO CALLEJERO
Por: Anguiano Díaz Karime

INTRODUCCIÓN:
Hablar del acoso callejero ha sido generador de polémicas alrededor del mundo, ha llegado a ser tan importante, como el tema del aborto.
Diversos instrumentos internacionales han resaltado la problemática del acoso en la calle, entre estos: la Conferencia Mundial sobre Derechos Humanos y la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer. Ambas recomiendan eliminar la violencia contra la mujer en la vida pública y privada, como base fundamental para asegurar su pleno desarrollo (BCN, 2016).
En este marco, el acoso callejero contraviene al menos dos derechos fundamentales de toda persona, como la libertad y la seguridad. Aunque el acoso en la calle afecta principalmente a las mujeres, el fenómeno se extiende a todos los géneros y a ambos sexos. Siendo los más afectados las personas de color, de bajo ingreso, las personas que se identifican como lesbianas, gay, bisexuales o transgéneros (BCN, 2016).
La movilidad de todos los miembros de la comunidad LGBQT es a menudo restringida por el acoso callejero y la violencia motivada por la expresión de género real o percibido de la víctima o su orientación sexual (SSH, 2015).
Si bien aún no hay una definición estandarizada de acoso callejero, las diversas organizaciones sociales han operacionalizado el concepto de manera tal de dar cuenta de la problemática, así como también actuar frente a ella (BCN, 2016).

DESARROLLO:
¿QUÉ ES?

Si bien no existe una definición única del acoso callejero, la desarrollada por Stop Street Harassment (2015), es una de las más utilizadas hoy en día, definiendo la problemática, como “las interacciones no deseadas en el espacio público, motivadas por el género real o el percibido, orientación sexual o expresión de género, que hace a quien es acosado sentirse, irritado, enojado, humillado o asustado”. Este tipo de violencia genera impactos negativos en las victimas: como temor, inseguridad, pérdida de autonomía, independencia y libertad de desplazamiento.
Por otro lado Goffman (1989) define el acoso sexual como la interacción entre dos desconocidos, enmarcados en una dinámica de contenido sexual, en la que al menos uno de los participantes expresa acciones como toqueteos, exhibicionismo, contacto físico o expresiones verbales que no son bien recibidas o permitidas por la otra persona, de modo que, implicaría un desequilibrio en las relaciones de poder.
En otros 5 términos, es una conducta sexual no deseada perpetrada por un acosador, de lo cual resulta un abuso físico, sexual o psicológico dirigido hacia una o varias víctimas, independientemente de su ubicación, que puede ser el trabajo, la calle, el transporte público, una institución educativa o en espacios privados como la casa (Egyptian Center for Woman’s Rights, 2008).  
National Street Harassment Report, documento elaborado por Stop Street Harassment en el año 2015, releva que una de las consecuencias de dicha falta de garantías para moverse en la esfera pública es una forma de violencia de género, toda vez que puede inhibir o restringir la participación de las mujeres en asuntos públicos, ya que el requisito primario para dicha participación es el poder moverse con seguridad (National Report, 2015).

¿A QUIENES AFECTA?
National Street Harassment Report (SSH, 2014) da cuenta de los resultados de un estudio de cobertura nacional, llevada a cabo en Estados Unidos sobre el acoso sexual callejero. La metodología utilizada incluyó encuestas por internet a 1.000 varones y 1.000 mujeres, las que fueron llevadas a cabo por GFK, empresa líder en investigación, entre los meses de febrero y marzo del año 2014. Adicionalmente, SSH condujo 10 focus groups en diversos Estados del país que se llevaron a cabo entre agosto del 2012 y marzo del 2014.
El estudio demostró que el 65% de las mujeres ha experimentado acoso callejero, donde el 57% experimento acoso verbal, el 41% formas físicamente agresivas, donde el 23% ha sido tocada (con contenido sexual), 20% ha sido seguida, el 14% ha sido víctima de un flashing y 9% ha sido forzada a hacer algo de orden sexual. Entre los hombres el 25% ha sufrido acoso callejero, un 18% acoso verbal y un 16% formas físicamente agresivas. La mayoría de los hombres que habían sido acosados se identificaban más como LGTB que como heterosexuales (SSH, 2014).
El reporte concluye, que las personas de color, de bajo ingreso, las personas que se identifican como lesbianas, gay, bisexuales o transgéneros, fueron desproporcionadamente más afectados por el acoso callejero, que otras poblaciones.
Mientras que las mujeres también pueden acosar a los hombres en la vía pública, la desigualdad de género significa que existen ciertas dinámicas de poder en juego. Por lo tanto, la frecuencia con la cual las mujeres son víctimas del acoso callejero, la amenaza subyacente de ser violadas y el impacto que el acoso callejero ejerce sobre la vida de las víctimas es raramente comparable a los daños que podría percibir un hombre. Por estas razones, el trabajo de Stop Street Harassment se centra el acoso callejero perpetrado por los hombres hacia las mujeres (tanto cis como trans) o personas que son percibidas como mujer, con un foco secundario en el acoso de miembros de la comunidad LGBQT (SSH, 2015).

CONCLUSIÓN:
Razones por las que el acoso callejero es grave:
  • o   causa resultados emocionales negativos.
  • o   se puede intensificar sin previo aviso.
  • o   puede ser un “trigger” para sobrevivientes de violación.
  • o   causa las personas a cambiar sus vidas.
  • o   Los jóvenes están siendo acosados.


BIBLIOGRAFÍA:
o   Biblioteca del Congreso Nacional de Chile, 2016. Acoso callejero. Recuperado de: https://www.bcn.cl/obtienearchivo?id=repositorio/10221/23607/1/BCN%20Callejero_final.pdf
o   Stop Street Harassment, 2015.¿Qué es el acoso callejero?. Recuperado de: http://www.stopstreetharassment.org/wp-content/uploads/2011/05/Qu%C3%A9-es-el-acoso-callejero.pdf
o   PUCP, 2014. Acoso sexual callejero y sexismo ambivalente en jóvenes y adultos jóvenes de lima. Recuperado de:
http://tesis.pucp.edu.pe/repositorio/bitstream/handle/123456789/5395/GUILLEN_FLORES_ROSA_ACOSO_SEXUAL.pdf?sequence=1

Comentarios